Historia

La Escuela Básica “sagrado Corazón de Jesús”, dirigida por la Congregación de Hermanas Josefinas región Venezuela fue fundada en octubre de 1986. Es una extensión de la obra Educativa Josefina, quienes motivado por el Ideario que contiene la doctrina y vivencia de los Fundadores, caracterizan e identifican en un mundo pluralista la misión irrepetible del Padre José María Vilaseca y de la Madre Cesarita Ruiz de Esparza y Dávalos, quienes fieles siempre al Espíritu y al Magisterio de la Iglesia, nos han transmitido un estilo de educar. Funcionaba en las instalaciones de la Casa Hogar del mismo nombre con una cantidad de 25 alumnos para el 1er. Grado y 17 alumnos para el 2do. Grado; siendo maestra Sor Miriam Bonilla y Sor María Trinidad Ramos. Para el año 1987-1988 se crea un tercer grado, por lo tanto, se inicia la construcción de tres salones con la colaboración de organismos oficiales. Así sucesivamente se crea un grado de acuerdo a las necesidades existentes. Los Docentes eran pagados por el Estado y otros pagados por el Colegio.

Padre José María Vilaseca
Madre Cesarita Ruiz de Esparza y Dávalos

En el año 1992-1993 en vista que no se contaba con los recursos necesarios para sostener la Institución, se hace la solicitud de afiliación a la AVEC y al año siguiente es aprobada. La AVEC, es una asociación civil, sin fines de lucro, abierta al diálogo ecuménico, sin afiliación política, al servicio de la iglesia y de la Comunidad Nacional Venezolana. Fundado en 1945, agrupa a todas aquellas Instituciones Educativas que voluntariamente piden asociarse y que se definen por un proyecto de calidad, evangelizador de compromiso creyente y de cambio social. En este período se dan los pasos para el cambio del nombre de la Institución en 1992-1993 deja de ser Escuela Básica “Sagrado Corazón de Jesús” y se convierte en Unidad Educativa Colegio Josefino “María Inmaculada” con los niveles de: Inicial, primaria y secundaria hasta 3er año. Para el Año Escolar 2006-2007 se hizo realidad el sueño de muchos Alumnos, Padres y Representantes, el cual era la creación del Diversificado y para el Año Escolar 2007-2008, se gradúa la primera promoción de Bachilleres en Ciencias Básicas y Tecnología con 59 graduandos.

Actualmente está afiliada a la Asociación Venezolana de Educación Católica y goza del subsidio a través del convenio AVEC-MPPE.

Misión

La Unidad Educativa Colegio “Josefino María Inmaculada” junto a la Asociación Venezolana de Educación Católica, ofrece a la comunidad de Tinaquillo, una educación de excelencia, centrada en los valores del evangelio. Nuestra misión es ofrecer una educación que haga de los valores humanos y cristianos, los ejes transversales; privilegiando de manera especial, la formación desde y para la vida, el amor, la justicia, la libertad responsable, la solidaridad, la paz, la participación y la integración Nacional. El ideal es Cristo, el Hombre Nuevo; a él se quiere alcanzar mediante una Educación Cristiana, Josefina, que sea vivida en Comunidad Educativa.

Visión

El Ideario de la Congregación de las Hermanas Josefinas, el Proyecto pastoral del Centro y el Proyecto Educativo pastoral AVEC, son fuente de inspiración constante de las acciones educativas que se realizan conjuntamente entre las Religiosas, Profesores, Seglares, Padres de Familias, Alumnos, y otros colaboradores.
El Alumno: Es el primer autor de su proceso educativo, protagonista de su propio aprendizaje. Ser singular, autónomo que asume el plantel como una prolongación de su hogar, motivado permanentemente para un aprendizaje significativo, inquieto por el desarrollo de su fe, y en proceso de maduración de los valores que lo capacite realmente para la vida y la convivencia social.
Docentes: Enamorados de su vocación y misión, profesionalmente competentes, abiertos al cambio, en formación continua, creativos y dinámicos. El docente debe saberse servidor de un proyecto y agente que continúa y completa la acción educadora de la familia.
Personal Directivo: Directivos con mística, sin miedo al riesgo, abierto al futuro, que apuesten por la esperanza y que estén dispuestos en todo momento a dar lo mejor de sí mismo por la educación que soñamos.
La Familia: Deseosos de aprender su oficio de padres, que vean en el colegio una prolongación de su hogar y en el personal unos amigos que les ayudan en su tarea educadora a través del trabajo mancomunado, manteniendo con ellos relación de afecto, colaboración y respeto mutuo.
Personal Administrativo y Obrero: Con autoestima elevada que se sienta también con vocación de maestro y sujeto corresponsable del Proyecto de Centro y en formación permanente, participativos e innovadores.
Comunidad Educativa: Unidos por vínculos firmes de fe, solidaridad y compromiso educacional con participación viva y real con niveles generales de auténtica comunidad cristiana.
Escuela: Lugar de formación integral de la persona, en donde se respire la pasión educadora, evangelizadora y liberadora, accesible a todas las clases sociales, con opción preferencial a los más necesitados, de puertas abiertas para las familias, y vivencialmente comprometida con el quehacer y el devenir de las respectivas comunidades.